Pullaro, el verdugo de los estatales: convierte la salud en un lujo inalcanzable

Maximiliano Pullaro, el gobernador que prometía eficiencia y transparencia, ha demostrado ser un experto en vaciar los bolsillos de los trabajadores estatales de Santa Fe.
La obra social provincial, IAPOS, se ha convertido en un símbolo de su gestión: aumentos desmedidos, prestaciones recortadas y una administración que prioriza el ajuste por sobre la salud de sus afiliados.
Con todas las letras Pullaro es un ladrón. Le subió a los trabajadores el servicio complementario del IAPOS de $10.000 a casi $100.000. Algunos afiliados pagan cerca de $300.000. Eso sin contar la cuota mensual de afiliado (llegan a casi 1 millón de pesos). ES UNA RATA LADRONA! pic.twitter.com/kKmHYhGhGf
— Javier Gonzáles (@javigonza2016) May 31, 2025
Desde enero de 2024 hasta mayo de 2025, los costos de los servicios médicos se han disparado: la orden de consulta pasó de 650 pesos a 3.600, el bono de 130 pesos a 900, y la orden de internación de 2.600 pesos a 36.000.
El servicio complementario, que incluía prestaciones esenciales, aumentó de 2.600 pesos a 20.000 en el mismo período. Estos incrementos, que superan ampliamente cualquier ajuste salarial, han dejado a miles de trabajadores en una situación crítica.
La situación se agrava con decisiones como la de la Asociación Rosarina de Anestesia, que, ante la falta de pagos por parte de IAPOS, decidió que los afiliados deben abonar de su bolsillo los servicios de anestesia durante las intervenciones quirúrgicas.
Esto significa que, además de los aumentos desmedidos, los trabajadores deben afrontar gastos adicionales para acceder a servicios básicos de salud.
La respuesta del gobierno provincial ha sido trasladar la gestión administrativa de IAPOS al Ministerio de Economía, argumentando un déficit del 5 por ciento en el primer trimestre de 2024. Sin embargo, esta medida no ha solucionado los problemas de fondo y ha generado aún más incertidumbre entre los afiliados.
Los gremios, como Festram, han denunciado que los aumentos salariales acordados en paritarias son absorbidos por los incrementos en los servicios de la obra social, dejando a los trabajadores sin mejoras reales en su poder adquisitivo. Además, han señalado que las prestaciones siguen interrumpidas y sin acceso para la mayoría de los trabajadores.