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Peronista hasta ahí: Perotti esquivó la presión tras el fallo de la Corte y busca incrementar su imagen positiva

Omar Perotti, gobernador de Santa Fe, tantea el terreno que más le convenga de cara a 2023.

En el scrum de gobernadores que bancaron al presidente Alberto Fernández y criticaron el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que aumentó cautelarmente la coparticipación correspondiente a la ciudad de Buenos Aires, quien decidió no plegarse fue el gobernador santafesino Omar Perotti.

Con la decisión de la Casa Rosada de pagarle a la capital vía bonos, el santafesino evitó pasarse de largo en la curva como sus colegas. A pesar de que allegados aseguran off the record que coincide y apoya el reclamo de los gobernadores, Perotti eligió no enfrentar públicamente a los cortesanos, en otro movimiento que se enmarca en la construcción de su imagen nacional.

Los motivos por los que Perotti decidió mantener el perfil bajo y no plegarse al movimiento de la Liga de gobernadores se desconocen. A su alrededor adujeron “problemas de agenda” para no sumarse a la escena que reunió al Presidente y catorce mandatarios provinciales.

En clave 2023, sus rivales internos aprovecharon la oportunidad para pegarle: los precandidatos a gobernador Marcos Cleri, referente de La Cámpora en Santa Fe, y Leandro Busatto, del rossismo, le exigieron públicamente que se exprese apoyando la postura del Gobierno.

Antes del desaire de Fernández, catorce gobernadores peronistas habían firmado un comunicado bancando al Gobierno. No quieren que se pierdan las obras que llevan adelante en todo el país, quizás la única virtud que Cristina Fernández le reconoce a Alberto Fernández.

Tampoco quieren favorecer a un rival claro como Horacio Rodriguez Larreta de cara a la carrera presidencial. Perotti, por su parte, hace equilibrio. No quiere quedar mal con nadie. Y camina hacia el 2023.

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