Con amigos así, para qué tener enemigos: prestó su auto, se lo chocaron y lo encontró desguazado
Un vecino, al encontrarse con problemas mecánicos en su vehículo, solicitó la ayuda de un amigo para prestarle su automóvil marca Ford Focus. La finalidad era llevar a su nieto y a tres jóvenes cadetes de policía a la escuela de dicha fuerza en la ciudad de Recreo.
Sin embargo, durante el recorrido, el conductor se enfrentó a complicaciones al pasar un badén, lo que resultó en la rotura de la parte delantera del automóvil y le impidió continuar.
Ante esta situación, llamó a una grúa para llevar el coche a un taller mecánico. Al llegar, el mecánico le informó que no disponía de espacio, por lo que el vehículo debía quedar en la calle hasta su reparación al día siguiente.
Desafortunadamente, la situación empeoró durante la noche. Al día siguiente, al llegar al taller, el propietario del automóvil descubrió que le faltaban las dos ruedas del lado derecho, la rueda auxiliar, así como el equipo de audio y gran parte de los elementos del tablero.
José, el dueño del vehículo, compartió su consternación con los medios locales, expresando: "Nunca pidas ni prestado, y mucho menos regalado", como dice el refrán popular.
Además, añadió: "Jamás pensé que podría pasar algo así... Encima, el auto no es mío, es de un amigo. Nunca más vuelvo a pedir nada", declaró casi al borde de las lágrimas.
