Aunque el propio Pullaro admitió que "las cosas no están bien con los empleados públicos ni con los privados" y llamó a "ajustarse", defendió su gestión afirmando que "el 70 por ciento de los trabajadores no perdió frente a la inflación". Lo hizo sin ofrecer datos que respalden esa afirmación, mientras se desentiende de la magra paritaria que su gobierno impuso durante el primer trimestre de 2025.

Lejos de dar respuestas concretas a los sindicatos, el gobernador intentó minimizar los reclamos asegurando que en 2024 los empleados "le ganaron por 8 puntos a la inflación" y que solo el "30 por ciento" habría quedado atrás en lo que va de este año.

Sin embargo, los números del Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec) desmienten sus declaraciones: los trabajadores estatales recibieron apenas un 5 por ciento de aumento entre enero y marzo, mientras que la inflación acumulada fue del 9,5 por ciento. Esa diferencia de 4,5 puntos sigue sin ser reconocida ni compensada por el Ejecutivo.

La tensión escaló aún más esta semana, tras la primera reunión paritaria del segundo trimestre, realizada en la ciudad de Santa Fe. A pesar de la firme exigencia de los gremios, el gobierno no presentó ninguna oferta salarial. Al día siguiente, desde Rosario, en un evento de transporte fluvial, Pullaro volvió a esquivar el conflicto y repitió su polémico planteo del “70/30”, en un intento por desdibujar una situación que, según los sindicatos, ya es insostenible.

Para los trabajadores públicos, el ajuste provincial reproduce las políticas económicas del gobierno nacional, con recortes que agravan la precarización laboral y el deterioro de los ingresos. La falta de respuesta, sumada a la negación del problema, profundiza el malestar y marca un punto de quiebre en la relación entre el gobierno de Pullaro y los sectores gremiales.