El ministro de Gobierno, Fabián Bastia, anunció que se descontará el día a los docentes que adhieran al paro, en un mensaje que suena más alineado con la rigidez del gobierno nacional que con la defensa de los trabajadores.

“Primero, digamos que es otro paro de Baradel que algunos actores provinciales deciden acompañar. En esta provincia, Baradel ya no le hace más paro a los santafesinos por decisión del Gobierno de Santa Fe”, disparó Bastia, apuntando al líder sindical de CTERA.

El funcionario insistió en que la prioridad es el cumplimiento del calendario escolar: “Los alumnos tienen que estar en la escuela y quienes decidan acatar las órdenes de Baradel se les descontará el día, como ocurre habitualmente. Las escuelas van a estar abiertas para que quienes quieran trabajar lo puedan hacer. Nada cambió.”

Además, remarcó que en Santa Fe el gobierno provincial define el ciclo lectivo, no los sindicatos: “Tiene que quedarle claro a la ciudadanía santafesina y a toda la comunidad educativa que el paro lo vuelve a fijar Baradel. En Santa Fe, quien dice cuándo hay clase es el Gobierno”.

Mientras los docentes reclaman por la pérdida de poder adquisitivo y la eliminación del Fondo Nacional de Incentivo Docente, la postura de Pullaro genera críticas por castigar a un sector que dice defender, en un contexto de ajuste económico impulsado por Milei. Las escuelas locales permanecerán abiertas el lunes, pero la adhesión al paro promete ser alta.