Macabro hallazgo en un reservorio de la Capital: un ex agente penitenciario detenido por el asesinato de Lucas Caraballo

El 5 de enero, un pescador descubrió́ un macabro hallazgo en un reservorio ubicado en la intersección de calle Gorostiaga y la avenida de circunvalación oeste, detrás del club de Golf del Jockey Club. Dentro de una bolsa flotaban restos humanos en avanzado estado de descomposición, con signos evidentes de mutilación: les faltaban las manos, los pies, las piezas dentarias y fragmentos de piel con tatuajes.
La Policía de Investigaciones (PDI) y los fiscales de Homicidios iniciaron una exhaustiva investigación que llevó, el 9 de enero, a vincular el cadáver con la desaparición de Lucas Rafael Caraballo, un profesor de danzas. Tras la denuncia de su familia, la policía encontró́ similitudes entre la descripción del desaparecido y los restos hallados, confirmando la hipótesis de que el cuerpo pertenecía a Caraballo.
El giro en la investigación ocurrió́ en febrero, cuando una mujer denunció a su expareja por abuso sexual, lesiones y amenazas. Durante el interrogatorio, el acusado, identificado como E. J. E. P. C., de 35 años y ex agente penitenciario, mencionó que residía en una casa que, según él, alquilaba a un hombre desaparecido. Al verificar la dirección, los investigadores confirmaron que se trataba del domicilio de Caraballo, lo que vinculó al detenido con el crimen.
El sospechoso enfrenta cargos por homicidio, privación ilegítima de la libertad, lesiones dolosas y abuso sexual gravemente ultrajante en un contexto de violencia de genero. En los próximos días se llevará a cabo la audiencia para definir su prisión preventiva