La mujer se asustó de tal modo que creyó y cayó en la trampa de un nuevo secuestro virtual. El delincuente le exigió 150 mil dólares y joyas a cambio de la libertad del supuesto hecho delictivo.. La señora le confió que sólo contaba con la cifra de 50 mil dólares.

El secuestrador virtual aceptó la cantidad, le ordenó que colocara los billetes en una bolsa de consorcio y la introdujera en un contenedor ubicado en Dorrego y Catamarca. Desesperada, la víctima se dirigió al lugar y dejó el paquete.

Al regresar a su hogar, despertó al marido y le refirió todo lo que acaba de pasar. El esposo, con más tranquilidad, llamó a la hija de ambos al teléfono celular y, efectivamente, atendió la llamada. Estaba sana y salva en su propia casa. Con el panorama más claro, decidieron hacer la denuncia en la comisaría 3ª y seguidamente, intervino la Justicia.

Esta modalidad de delito se viene repitiendo en la ciudad. En febrero pasado, el Ministerio de Seguridad, reiteró la necesidad de tener recaudo para no ser víctima de los denominados “secuestros virtuales”.

En el caso de recibir ese tipo de llamadas telefónicas, la cartera de Seguridad de la provincia recomienda:

-No brindar ninguna información personal, de un familiar, de actividades que se realicen o de los bienes que se posean.

-Advertir a los niños en el caso de que éstos acostumbren a atender el teléfono, para que no den esa información a desconocidos.

-Más allá de cualquier amenaza que se pueda recibir por teléfono, cortar inmediatamente la comunicación, tratando en lo posible, de anotar el número de teléfono desde el cual lo han llamado.

-En caso de no poder anotar el número, o si llaman desde un número desconocido, cortar de todos modos la comunicación telefónica.

-Tratar de ubicar a sus familiares. Si no puede hacerlo, comuníquese con otras personas que puedan a su vez ayudarlo a contactarse.

-Contactar inmediatamente a la policía a través del 911 o los números de la comisaría local.