Miles de personas festejaron el pase a la final del Mundial 2014 en el Monumento a la Bandera
Tras la clasificación del seleccionado argentino a la final del Mundial, las calles de la ciudad de Rosario se vistieron de celeste y blanco rumbo al Monumento nacional a la Bandera, punto de encuentro tradicional para cada festejo.
Tras 24 años, el seleccionado argentino consiguió el pase a la final de la Copa del Mundo. Una vez finalizados los 120 minutos de juego y la serie de penales los simpatizantes rosarinos salieron a festejar desplegando banderas y haciendo sonar las cornetas mientras que comenzaron a circular automóviles tocando sus bocinas y dándole un tono blanquiceleste a las distintas calles de la ciudad.
De este modo, Rosario pasó del silencio total a la euforia para celebrar el logro obtenido por el equipo de Alejandro Sabella en San Pablo.
Gente de todas las edades se abrazaba y entonaba las canciones del seleccionado albiceleste.
Una fiesta que aún continúa fue para todos, como en cada rincón de la Argentina, tras volver a clasificar para jugar una final y el pueblo rosarino armó una fiesta.