Giro inesperado en el caso de la mujer baleada en su cabeza que ingresó al Hospital Cullen
En las últimas horas una mujer de nombre Yesica Cáceres de 45 años venía al mando de una motocicleta cuando, colisionó con una camioneta en la intersección de Rivadavia y Matheu sufriendo lesiones por lo que fue trasladada por una unidad sanitaria al Hospital Cullen.
Al ser tratada por los médicos, se reveló la presencia de un proyectil de bala incrustado en el cráneo, a la altura del parietal izquierdo, por lo que se realizó una cirugía de extracción luego de concretar la tarea el fragmento de plomo fue entregado a las autoridades policiales para su análisis.
Como consecuencia del hallazgo del proyectil, la investigación se orientó hacia un intento de femicidio.
Tras comenzar las tareas investigativas, el caso tomó un giro abrupto cuando la madre de Yesica reveló que esa herida de bala databa de hace más de 30 años. En declaraciones formales, la progenitora afirmó que cuando su hija tenía 12 años sufrió dicho incidente. Desde entonces el proyectil quedó alojado en su pómulo izquierdo.
Tanto la madre como el hijo de Yesica agregaron que el incidente actual se trataba de un accidente de tránsito y no de un hecho de violencia intencional.
Por lo que el informe final emitido por el médico forense corroboró las lesiones sufridas en el siniestro vial. Con estas precisiones el fiscal Broggi cerró la investigación de la Brigada de Femicidio, remitiendo el caso a la fiscalía correspondiente para su seguimiento legal.
Por otra parte, Yesica continúa internada en la unidad de terapia intensiva en estado crítico con asistencia mecánica respiratoria, por un traumatismo de cráneo grave sufrido en un accidente de tránsito, además tiene perforado uno de sus pulmones y fractura en uno de sus miembros inferiores.
