El lunes por la noche, en distintas entraderas, dos hombres perdieron sus coches en distintos barrios de Rosario. Uno en Fisherton y otro en Echesortu, dos barrios marcados por la inseguridad.
La primera ocurrió en Sánchez de Loria y González Sabathie, a pocas cuadras de distancia de donde la semana pasada, una pareja fue sorprendida por ladrones cuando llevaba a su hija al colegio. La segunda, sucedió en Río de Janeiro al 800, a sólo dos cuadras de la casa de Mariano Bertini, el muchacho de 22 años asesinado cuando le abría el portón del garage a su papá.
De la misma forma que asaltaron a los Bertini, dos vecinos de la ciudad denunciaron que delincuentes armados los abordaron cuando intentaban guardar sus autos en sus respectivas cocheras.
Una de las denuncias fue radicada cerca de las 21 de este lunes en la comisaría 17ª por un hombre de 50 años que perdió su Volskwagen Polo; la otra fue presentada en la 6ª –la misma que investiga el asesinato del joven Bertini– por un vecino a quien le quitaron su Volkswagen Suran.
