A los 10 minutos, Darío Benedetto llegó a la apertura del marcador, con u robo al defensor del “Canalla” y una definición exquisita sobre el arquero. Pero como le sucede al “Xeneize” últimamente, se desconcentra en el fondo y después de 6 minutos, apareció Teófilo Gutiérrez e igualó el encuentro. Con el festejo provocador del colombiano, el partido entró en un descontrol, luego de que los jugadores de Boca se le fueran encima.

Tras esa jugada del empate, Darío Herrera tomó la decisión más fácil y cómoda para los árbitros, expulsó al propio Gutiérrez y a Ricardo Centurión, para tratar de hacer “justicia”.

Los dirigidos por Guillermo Barros Schelotto fueron los dominadores del primer tiempo, con tres remates que se estrellaron en el travesaño: uno de Carlos Tevez, otro de Benedetto y el último de Cristian Pavón, en un córner que casi se transforma en un gol olímpico. Por otro lado, el árbitro se comió un penal de Fabra sobre Paulo Ferrari, que cayó en el área local tras una barrida desafortunada del lateral “Xeneize”.

El segundo tiempo fue totalmente distinto, Boca salió apagado y se topó con un Central muy bien plantado en todas sus líneas. Es por eso que la más clara de Rosario fue el disparo a quemarropa de Washington Camacho que tapó Guillermo Sara.

Con este resultado, Boca se alejó de la punta del campeonato y no encuentra un hilo regular. En tanto, el equipo de Eduardo Coudet no pudo volver a ganar y es otro de los que quedó lejos del torneo.