La letrada judicial relató que por testimonios saben que el auto venía por Cerrito, en la misma dirección que caminaba la víctima y “dobló muy despacio, hacia Constitución cuando lo ven caminando”. Agregó Fabbro que los ocupantes del auto -habrían sido cuatro- frenaron y dos de ellos bajaron. Abordaron a Procopio a punta de pistola y le pidieron sus pertenencias. Según testificaron los obreros de la obra situada en Cerrito 3681, el hombre de 48 años les dio el celular y la billetera sin resistencia, tras lo cual “recibió un culatazo de un arma, intentó escapar hacia la obra para pedir auxilio, y luego un disparo en el lado izquierdo de la cintura lo ultimó”, completó la fiscal.

El hombre no llevaba consigo portafolios y tampoco ninguna suma considerable de dinero. Sólo le robaron la billetera y el teléfono celular.

Procopio fue atendido por el Sistema Integrado de Emergencia Sanitaria (SIES), que acudió minutos después pero los médicos nada pudieron hacer para evitar el deceso.

En diálogo con los medios, la fiscal precisó que una cámara detectó a dos delincuentes, aunque no descartan que haya más dentro del auto. Se esperan mayores precisiones en las cámaras en la zona.

La reconstrucción del hecho se hizo a partir de los testigos y también de una cámara privada que un vecino puso a disposición, y pudo ver que “eran dos los delincuentes, a quienes no se podía ver el rostro, y no se descarta que haya habido una o dos personas más dentro del auto”.

Continúan las investigaciones, la fiscal Marisol Fabbro, el fiscal Pablo Pinto quien se puso a disposición voluntariamente y la Policía de Investigaciones.