Política
Tensión en Reconquista

Trabajadores de Algodonera Santa Fe, en asamblea permanente por sueldos adeudados desde diciembre

Manifestación de los trabajadores de la Algodonera Santa Fe.

Trabajadores de la empresa textil Algodonera Santa Fe, de Reconquista, mantienen una asamblea permanente para determinar acciones a seguir ante la falta de trabajo en la empresa. Mario Gómez, uno de los delegados de los trabajadores, reconoció que le la situación es muy delicada a raíz de las numerosas promesas incumplidas de la patronal.

"Queremos cobrar algo de lo adeudado, nos están debiendo la segunda quincena de diciembre más el aguinaldo y la primera quincena de enero, que ya se cerró. Nosotros nos presentamos como corresponde", aclaró.

El delegado señaló que la empresa está trabajando en el mantenimiento de la parte eléctrica, que tiene cortado el suministro, pero “hay deuda de noviembre con algunos".

Gómez planteó que les “quieren dar solamente $ 1.000 y eso no nos sirve", dado que, planteó, "la idea es reclamar el sueldo que nos están debiendo. Nosotros trabajamos y queremos cobrar, así de sencillo".

La parte querellante, que representará a los trabajadores, identificó a Héctor Buonsanti, gerente administrativo financiero de la algodonera, como uno de los responsables, al señalar que pidió “concurso preventivo” y cesación de pagos con fecha 14 de julio de 2014, ante el Juzgado Comercial N° 7 seccional 14, en Capital Federal.

La querella apuntó a NOVA que los trabajadores de la algodonera “hace más de cinco años que viven de promesas incumplidas, y todos tienen hijos”, por lo que adelantaron que presentarán denuncias ante el Ministerio de Trabajo con copias de “todos los chanchuyos descubiertos”.

En su defensa –a la que tuvo acceso este portal-, Buonsanti afirmó ser “gerente administrativo financiero y nada más” de la algodonera, y remarcó que “como en toda sociedad anónima, las decisiones las toma el directorio de la empresa”. “Soy un empleado también”, subrayó.

Historia

El 15 de enero, los obreros rechazaron la oferta de la empresa e hicieron una contrapropuesta en la asamblea en la que analizaron la oferta de los propietarios de la industria de abonarle $ 1.000 a cada uno.

Rubén Lemos, secretario de la Asociación Obrera Textil, señaló que "la empresa pretende poner en marcha la planta pero entregarle nada más que 1.000 pesos a cada trabajador".

"Si se estiran con un poco más de dinero, los muchachos entrar a trabajar, porque toda esta situación no la generaron los trabajadores. La gente quiere cobrar, por lo menos, la segunda quincena de diciembre, que ronda por cada obrero entre 4 y 5 mil pesos", indicó el gremialista.

A cada trabajador, la empresa le adeuda, en promedio, $ 20.000. Lemos remarcó que "la empresa está buscando que los obreros no entren a trabajar para que después tengan la culpa de la situación”. El dinero nunca llegó.

Juan C. Bandeo, referente del sindicato, manifestó a NOVA que durante la ​segunda quincena de diciembre, los $ 1.600 no fueron abonados, por lo que los trabajadores, que son 122, no están trabajando, pese a que solamente cumplen horas.

Pero la empresa tampoco pudo pagar la energía eléctrica. "No tienen para pagar 1.600 y quieren pagar la luz que son montos muchos más grandes", se quejó. Bandeo aseguró además “no saber qué quiere hacer la empresa. Porque es un rubro productivo, es rentable, pero no sabemos si quieren seguir o si quieren cerrar", resaltó.

El conflicto fue la nueva entrega de una serie de larga data. En mayo de 2014, los trabajadores de la algodonera cortaron la ruta 11 para manifestarse: casi 100 obreros caminaron pacíficamente desde el Parque Industrial, por calle Pietropaolo, hasta Boulevard Hipólito Yrigoyen, y de allí, hasta el puente sobre el arroyo “El Rey”, para posteriormente tomar la otra mano del boulevard y regresar a la algodonera. Llevaban pancartas con leyendas como “Queremos trabajar”, “Basta de mentiras” y “Por nuestra dignidad”.

Ese mes, el conflicto originó una serie de propuestas por parte del bloque Todos por el Norte, que contó con el pleno acompañamiento del Concejo Deliberante de Reconquista.

El concejal Enrique Vallejos expresó por entonces que "el riesgo de perder la fuente de trabajo coloca a 120 familias en un contexto de vulnerabilidad”, por lo que correspondía “gestionar ante las Empresas Provinciales de la Energía y de Aguas el beneficio de tarifa social para estos hogares, solicitando al municipio confeccione los estudios socio económicos pertinentes".

El cuerpo deliberativo, en tanto, autorizó en aquel momento un concurso local de precios, que tendría como función resguardar al personal, la maquinaria y la playa de maniobras del futuro complejo industrial de Reconquista, donde está la algodonera.

El Departamento Ejecutivo debería convocar a proveedores locales para que compulsaran las mejores condiciones en cuanto a precios, plazos de instalación y medidas estándares.

Estas inversiones forman parte de la contrapartida que debe hacer frente el municipio, respecto del proyecto integral aprobado en forma conjunta con el gobierno provincial, y serán solventadas con el Fondo de Obras Menores.

Asimismo, el Concejo Deliberante adelantó que solicitaría a la Mesa de Entrada Única (MEU) y al Juzgado de la 4° Nominación de Reconquista, el listado de procesos judiciales que comprometen a al municipio en carácter de demandada. Pero ningún concejal ni dirigente político apareció ahora y los trabajadores siguen a la deriva.

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