Finalizó el acto con una misa oficiada por el ex monseñor Molloghan y Soledad Pastorutti cantando
El acto realizado esta noche de miércoles comenzó con una misa oficiada por el ex arzobispo de Rosario, José Luis Mollaghan, luego tomaron el micrófono algunos familiares de víctimas y cerró Soledad Pastorutti cantando una canción que habla de "transformar este dolor".
"No fue una tragedia, fue un crimen social, un asesinato, un homicidio", sostuvo Claudia Vaio, madre de Santiago Laguía, una de las 22 personas que perdieron la vida el 6 de agosto de 2013. Durísima con sus palabras, la mamá de Santiago, dijo que los gobernantes "van a ser uno más en la historia de políticos corruptos del país", y si bien incluyó a toda la clase dirigente nombró a la intendenta Mónica Fein, el gobernador Antonio Bonfatti y la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Finalmente, destacó que "lo que se rescata de positivo en esta desgracia es la solidaridad, la misma que vemos hoy acá".
Antes, en un escenario montado en Oroño y Salta, el ex arzobispo de Rosario, José Luis Mollaghan, ofició misa durante unos cuarenta minutos, desde poco después de las 18.30, la cual fue seguida con atención por familiares de las 22 víctimas fatales de la explosión, amigos, vecinos de la zona y rosarinos que se acercaron a ofrecer su respeto en el primer aniversario de la tragedia.
Después, Mollaghan junto a los familiares para prender velas en honor de los fallecidos, frente al lugar donde estaban emplazadas las torres colapsadas. Algunos de los parientes más cercanos de las víctimas también subieron al escenario para compartir su dolor y reclamar justicia.
Finalmente, cerró el acto Soledad Pastorutti cantando entre tanto dolor. "Cantar se me hace un poco extraño", reconoció la artista de Arequito, y aseguró que entonaba "con mucho respeto y cariño" los versos de "Vivir es hoy".
